Bajo este principio, en la Sala de Pediatría del Instituto Nacional de Oncología y Radiobiología de La Habana, Cuba, funciona el proyecto de promoción de lectura “Libros para la Vida”.
Se trata de llevar alimento espiritual a niños enfermos, algunos en fase terminal y otros condenados a vivir eternamente con tratamiento médico, además de facilitar la relación entre padres e hijos en circunstancias de por sí difíciles.