Una de las muestras más conspicuas de la escena musical de Tokio, y que ha copado los últimos tres lustros por su calidad compositiva y connotada interpretación instrumental, es el cuarteto llamado Mono.
El profundo Sur estadounidense ha tenido, desde que William Faulkner comenzó a contarlo, su referente sonoro.
De no haber existido John Cage, no hubiera habido mucha de la música fantástica que escuchamos.
He aquí una de las mejores voces de la música estadounidense, una mujer capaz de hacer temblar al misterio con su garganta, una poeta sensible, atenta, desgarradora y, sin embargo, poco reconocida.
El arte de la música es una expresión integral, con su valor de uso, ritual, técnico y a final de cuentas político. Ese es el perfil recurrente de Moore: la expresión sonora como manifiesto político de un autor tan colectivo como independiente.
Las flores insospechadas de la cratividad brotan en momentos diferentes, hasta en mundos distintos. Esa parece ser la explicación razonable de los actores con una carrera musical intermitente.
La complejidad del mundo electrónico es uno de los signos de nuestro tiempo. En ella está ensamblado el paisaje sonoro de la fragmentación con el que se construye nuestra realidad en la actualidad. Esta sonoridad no describe un estilo musical sino un contenido, un valor auditivo. Y en ella no hay fundamentos estables ni directrices que acompañen al escucha a lo largo de un camino único.
La británica Florence Welch con esa presencia suya, tan poderosa de sibila roja, deslumbra con sus apariciones telúricas; con sus cantos sobre brujería y amores complicados; con su mezcla de influencias diversas (de Annie Lennox a Tom Waits); por The Machine, un aparato sonoro variable que puede consistir en un simple piano o por una banda de 32 músicos, la banda con la que busca hacer sentir y comprender a los escuchas.
La música ha acompañado a las strippers desde la Babilonia mitológica hasta hoy, con todas sus características y tradiciones diversas. Sin embargo, a través del tiempo el acompañamiento sonoro se ha ido especializando y adaptando a la época.
“If I had a Heart” es la canción que se escucha para abrir los créditos de una serie histórica y es, además, un manifiesto sonoro tan tribal y primigenio como latente de actualidad.
Aunque fuera de Japón Saori Yuki no era una cantante conocida, algún ejemplar de sus grabaciones llegó a manos del arreglista y pianista Thomas M. Lauderdale, director además de Pink Martini. Agrupación que se caracteriza por presentar ritmos retro, sensuales y desprovistos de una instrumentación recargada, los cuales combina con ideas de la rama conocida como “new exótica”, para convertirse en un híbrido sonoro muy placentero.
A la evolución electrónica ha estado ligado el quehacer de la mujer desde hace muchas décadas. Aunque su historia dentro de esta música aún no ha sido explorada con la debida atención. En muchas situaciones por el arraigado prejuicio de que las mujeres y la ciencia son cuestiones aparte; por la falta de documentación histórica y, a causa de lo mismo, por la indisponibilidad del material sonoro, perdido o desclasificado.
El programa BABEL XXI ha dado a conocer el hipermodernismo sonoro desde el año 2011 y se ha convertido en la alternativa radiofónica.
La obra literaria de Aldous Huxley fue inmensa y variada. Escribió cuentos, libros de viajes, tratados filosóficos, guiones para cine y narrativa. Numerosos libros que revelan una vasta cultura y gran curiosidad intelectual. En sus comienzos poéticos influyeron los simbolistas franceses (Rimbaud, Baudelaire y Lautréamont).
La sección rítmica jamaicana compuesta por Sly & Robbie, la más arrolladora y productiva del subgénero dub (invitada constante a cientos de grabaciones y como solistas), acudió al llamado de uno de los grandes pioneros escandinavos del electrojazz, y junto a él, Nils Petter Molvaer, unieron esfuerzos en uno de los experimentos más inspiradores y trepidantes de los últimos años, para crear Nordub (título y movimiento: dub nórdico).
El concepto de la Mystic Rhythm Society, basado en una mezcla de bebop, hip hop y free jazz controlado, pretende explorar las estructuras del universo y expresar esas formas por medio de la música.
US Rails son historia y guardia pretoriana al servicio de un santo grial sonoro: el rock de raíces u americana. Su existencia se lee como novela negra y se ve como una road movie.
Robert Rodríguez es oriundo de San Antonio, Texas. Nació en 1968 y actualmente es un icono popular y director de culto cinematográfico. Es, también, la encarnación de una marca registrada de un complejo proyecto multidisciplinario que abarca la escritura, el cine, la actuación, la hechura de tiras cómicas (Los Hooligans) y la fotografía, entre otras.
El disco Christmas de Michael Bublé se ha convertido en un clásico al que el tiempo ha legitimado. Pertenece por derecho propio a la misma categoría del de Bing Crosby o al de Elvis Presley. La voz de Bublé es fuerte y clara. Canta con solvencia, intención y flexibilidad. Y, por si fuera poco, el sonido es perfecto.
Los Rolling Stones se encontraban en el centro del huracán polémico, por el lanzamiento de “Street Fighting Man”, que recogía las experiencias que Jagger había sacado durante una revuelta. El tema se había convertido en un himno a nivel global y cada movimiento, independientemente de su particular reclamo, la usaba como estandarte sonoro: “¿Qué puede hacer un muchacho pobre/ excepto cantar en una banda de rock and roll?